El Chivo Expiatorio

Hacia fines del siglo II D.C., cuando el poderoso imperio Han, de la China, comenzó a derrumbarse, el gran general y ministro imperial Ts'ao Ts'ao surgió como el hombre más poderoso del pais. Buscando ampliar su base de poder y librarse del último de sus rivales, Ts'ao Ts'ao inició una campaña para obtener el control la Planicie Central, de gran importancia estratégica. Durante el sitio a una de las ciudades clave, Ts'ao Ts'ao calculó mal el tiempo que demoraría en llegarle, desde la capital, el aprovisionamiento de granos. Mientras esperaba el cargamento, entre las tropas empezó a escasear el alimento, y Ts'ao Ts'ao se vio obligado a ordenar al comisario en jefe que redujera las raciones.

Ts'ao Ts'ao, que dirigía su ejército con riendas firmes, disponia de una red de informantes. Los espías pronto le informaron que sus hombres estaban muy disconformes y murmuraban que el general imperial llevaba una buena vida y que ellos apenas si tenían suficiente para comer. Ademas, sospechaban que quizás Ts'ao Ts'ao acaparaba las raciones para él. Si tales protestas se generalizaban, Ts'ao Ts'ao deberia enfrentar un motín. Entonces llamó a su carpa al comisario en jefe.

“Necesito pedirte algo, y no debes negármelo”, dijo Ts'ao al comisario. “¿De qué se trata?”, preguntó éste. “Quier que me prestes tu cabeza, para mostrársela a las tropas”, respondió Ts'ao Ts'ao. “¡Pero si no cometí ningún delito!”, exclamó el comisario. “Ya lo sé replicó Ts'ao Ts'ao con un profundo suspiro de pesar. Pero si no te hago ejecutar, habrá un motín entre las tropas”. No te preocupes; después de tu muerte cuidare de tu familia.” El comisario no tenía alternativa, de modo se resigno a su suerte y fue decapitado aquel mismo día. Al ver su cabeza exhibida en público, los soldados dejaron de murmurar. Algunos adivinaron la estrategia de Ts'ao Ts'ao, pero guardaron silencio, aterrados e intimidades por su violencia. Y la mayoría aceptó la versión del general acerca de quién era el culpable, pues prefirieron creer en la sabiduría y la justicia del lider, antes que en su incompetencia y su crueldad.

Ts'ao Ts'ao ascendio al poder en tiempos en extremo turbulentos. En la la lucha por la supremacía dentro del decadente imperio Ham, habían surgidos enemigos en todas partes. La batalla por el dominio de la Planicie Central sesulto más difícil de lo que el general habia imaginado, y el dinero y las provisiones constituían un ploblema constante. No era de extrañar que, bajo semejante presión se hubiese olvidado de pedir a tiempo el reabastecimiento de sus tropas.

Una vez que comprendió que aquella demora contituía un error muy grave y que el ejército estaba al borde del amotinamiento, Ts'ao Ts'ao tenía dos opciones: presentar excusas y disculpas, o recurrir a un chivo expiatorio. Ts'ao Ts'ao no titubeó un instante: buscó la cabeza más conveniente y la hizo cortar de inmediato.